Jardín de Nenúfares
En muchas culturas orientales, los nenúfares simbolizan pureza y belleza debido a su capacidad de florecer en aguas turbias y aun así mantenerse limpios y radiantes. Este jardín rinde homenaje a estas hermosas plantas, destacando su elegancia y simbolismo.
Los nenúfares son plantas acuáticas, se encuentran en todo el mundo, excepto en las regiones polares y desérticas. Prefieren aguas tranquilas y poco profundas, como estanques y lagos, donde la corriente es débil y pueden establecerse fácilmente.
Algunas especies pueden sobrevivir en climas templados e incluso fríos, otras, están mejor adaptadas a regiones tropicales. Florecen generalmente durante los meses cálidos, y sus flores se abren durante el día y se cierran por la noche.
¿Cómo son las Nenúfares?
Hojas flotantes
Adaptadas para flotar y maximizar la exposición al sol para la fotosíntesis.
Flores impresionantes
Grandes y vistosas, en colores como blanco, rosa, amarillo, rojo y azul.
Raíces ancladas
Raíces que se anclan en el fondo del estanque o lago, absorbiendonutrientes del suelo.
Polinización
Polinizados por insectos como escarabajos y abejas, atraídos por sus colores y fragancia.
¿Loto o Nenúfar?
Familias: Los nenúfares son de la familia Nymphaeaceae (con 70 especies), y los lotos de Nelumbonaceae (con dos especies).
Hojas y Flores: En el loto, las hojas y flores se elevan; en el nenúfar, flotan sobre el agua.
Estambres y Carpelo: El loto tiene estambres filamentosos y carpelo en forma de barril; el nenúfar, estambres en forma de hoja.
Trabajo del equipo del Jardín Botánico
La creación del Jardín de Nenúfares en el Jardín Botánico de Quito fue un proyecto impulsado por la visión de Carolina Jijón, Directora Ejecutiva del JBQ, y desarrollado en conjunto con Ricardo Zambrano, Director de Jardines. Este espacio acuático transformó un área subutilizada en un vibrante jardín donde los nenúfares, colocasias, iris y otras plantas semiacuáticas son protagonistas, integrando también elementos de jardinería ornamental para complementar el entorno.
Con el diseño de la paisajista Mónica Bodenhorst de Navarro, se construyeron seis piscinas de distintos tamaños, empleando rocas seleccionadas para armonizar con el paisaje. El sistema de agua fue cuidadosamente implementado para asegurar las condiciones ideales para el crecimiento de las especies acuáticas, mientras que la jardinería circundante incorpora una rica variedad de plantas ornamentales que embellecen aún más el espacio.
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